Nehemías 3 NVI

Trabajemos en la seguridad de nuestras casas. (Nehemías 3:1-8)

Los Judíos estaban entusiasmados porque Dios había escuchado sus oraciones y tenían de nuevo la ciudad, por eso la reconstruyeron con esmero. (Nehemías 3:9-25)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *